No paran de surgir iniciativas que buscan reconocer de una manera u otra la excelencia de los cocineros de todo el mundo. Esta semana se celebraba en París la gran gala de The World Restaurant Awards, una propuesta que busca emular a los premios que se entregan en el cine nominando a restaurantes en 18 categorías diferentes, algunas más serias (mejor restaurante del año, restaurante más sostenible) y otras más cuestionables (mejor cocinero sin tatuajes, mejor cuenta de Instagram).

En esta primera edición de estos galardones el foco se puso en un restaurante de Suráfrica, Wolfgat, del ex periodista Kobus van der Merwe. Y es que este pequeño establecimiento ubicado en Paternoster se hizo con dos premios destacados, el de Mejor restaurante del año y el de “Destino fuera del mapa” que hay que visitar.

Otros nombres destacados de la noche fueron los del restaurante Inua (abierto en Tokio en 2018 por el alemán Thomas Frebel, que obtuvo el premio a la novedad del año); del brasileño Mocotó (premiado en la categoría Sin Reservas); del emblemático La Mère Brazier (premio al Clásico que perdura); del parisino Le Clarence (premio al Pensamiento original); del experiencial Vespertine (Atmósfera del año); y de los comedores sociales de Massimo Bottura (premio al Pensamiento ético), entre otros.

Centrándonos en la representación española, toca hablar solo de un premio, el de Forward Drinking, que viene a reconocer el trabajo con los maridajes y la sintonía vino/cocina. Este galardón recayó en Mugaritz de Andoni Luis Aduriz, que también era finalista al premio al Pensamiento original. Otros dos restaurantes españoles estaban nominados en distintas categorías: Enigma (Pensamiento original) y Elkano (Clásico que perdura).

El jurado que se encargó de decidir los premios estaba formado por 100 expertos del sector, como por ejemplo Elena Arzak, Alex Atala, Hélène Darroze y René Redzepi. A destacar la apuesta porque fuera paritario, esto es, integrado por el mismo número de hombres y mujeres.