Muy interesante es el trabajo de investigación que se está llevando a cabo en las cocinas de la Tunateca Balfegó, restaurante comandado por Ekaitz Apraiz. Una de estas investigaciones llevó a ofrecer a los comensales hasta un miso y un ramen a partir de huesos de atún rojo y de partes descartadas del lomo de este pescado. El potencial de ambas elaboraciones era tal que la firma ha apostado fuerte por intentar producirla y ofrecerla al consumidor final con toda su calidad intacta bajo Umi no aji by Balfegó, una nueva marca de productos asiáticos.

Ramen umi no aji by BalfegóTanto el ramen picante como el miso vienen en botellas de 750 ml, de donde se pueden extraer dos raciones, y que solo hace falta complementar con algunos ingredientes para obtener dos platos de alto valor gastronómico listos para consumir. Fideos, un huevo y unas setas en el caso del ramen y algas deshidratadas y tofu en el caso del miso, son algunas de las ideas que propone el equipo de Tunateca. Esta marca surge de un proyecto de economía circular y de salud, que apuesta por el residuo cero y por ofrecer productos excelentes y de gran valor nutricional.

Umi no aji ha presentado también su primera conserva de atún rojo con un concepto de joyería, solo lanzando la parte más preciada del atún rojo como es la ventresca, y con un fuerte compromiso con la sostenibilidad medioambiental y social, apostando por un aceite de oliva virgen extra ecológico de la provincia de Tarragona y la sal de Añana, una fundación sin ánimo de lucro que reinvierte todos sus ingresos en la recuperación del valle de Añana (Vitoria).