El mundo académico de raíz francesa es el suelo sobre el que se levanta el universo pastelero del británico William Curley. Es lo que se puede ver y apreciar en su obra enciclopédica Pâtisserie, trufada de procesos con paso a paso y llamadas constantes a la historia de cada elaboración. Este academicismo francés desde el que nos habla en pastelería, también está muy presente en heladería. De ahí que en sus helados tienda también a trabajar a partir de una crema inglesa base, un jarabe y un puré de fruta.
Sus tartas heladas y otras creaciones heladas sorprenden en sus combinaciones de sabores como en sus elegantes presentaciones. Y es que el verdadero mérito está en unas propuestas actualizadas que parten del referente francés.