Ubicada en la ciudad de Taichung (Taiwán), Minimal se ha convertido en la primera heladería del mundo en recibir una estrella Michelín. El impulsor de este original establecimiento, que abrió sus puertas hace solo tres años, es Arwin Wan, anteriormente pastelero del restaurante Sur con una estrella Michelin.
¿Pero cuál es su filosofía y qué la ha llevado a lograr este hito? Minimal destaca por ser algo más que una tienda de postres o de helados. Une sabores y texturas a través de variaciones de temperatura y combinaciones creativas, utilizando ingredientes locales de Taiwán.
Premiada hace un tiempo con un Bib Gourmand, está a medio camino entre una boutique de té y una heladería. Cuenta con una zona de comedor en el segundo piso con techos altos y originales baldosas de ladrillo rojo. “Los cubiertos están finamente elaborados y el diseño del menú transmite una sensación de selección cuidadosa y atención al detalle”, afirman los inspectores de la guía roja. "Realmente podemos sentir el toque personal del joven equipo detrás de escena. Son buenos narrando historias y transmitiendo maravillosamente su filosofía culinaria. Lo que nos impresiona es cómo cada plato presenta tres elementos que no se muestran abiertamente, sino que se combinan sutil y suavemente para revelar sus sabores matizados", describen.
El menú degustación presenta una variedad de texturas frías, desde sorbetes hasta helados estilo nitro, ofreciendo texturas intrigantes y sabores delicados. Una de las creaciones que destacan los inspectores es -40º Yuzu/Moroheiya, un helado con forma de piruleta que transporta instantáneamente a la infancia. “La textura no es la de la típica piruleta, recuerda al algodón de azúcar en un tamaño más pequeño para prolongar el momento en que se derrite en la boca. La textura es exactamente la misma: ligeramente compacta, aireada y de fusión lenta, permitiendo que los sabores del yuzu y la elegante astringencia del moroheiya emerjan gradualmente”, añaden.