La heladería ha puesto el pie en el acelerador para salir en busca de nuevos temas que rompen con el guión que tradicionalmente había marcado la trayectoria de este sector. En Arte Heladero 193 cristalizan inquietudes que se venían fraguando hace relativamente poco tiempo y que acaban tomando cuerpo en las líneas de trabajo más dispares. Un abanico de temas muy variados se presenta en una heladería más vanguardista que nunca. La colaboración entre un heladero como Carlo Guerriero y la Universidad de Cádiz para llevar a la heladería azúcares más saludables; una nueva generación de bebidas vegetales para lograr helados más limpios, caso de Natalia Ramírez; la técnica del asado al horno para dar forma a los sorbetes más invernales en un apasionante artículo firmado por Aitor Otin; el desarrollo de nuevas funciones para el praliné dentro de las recetas, con Christophe Domange; y granizados que se reformulan para ofrecer más calidad y variedad gastronómica, gracias a Martín Lippo y Jordi Roca. Así se presenta una heladería que rompe con su propia historia para situarse a la altura de los tiempos que corren.