Los helados de autor se están convirtiendo en el gran reclamo de las heladerías hoy en día. Y es que estas especialidades de la casa no solo ayudan a construir la identidad de un negocio artesano, sino también se convierten a menudo en auténticos superventas. Arte Heladero 208 nos lo muestra a cada paso que damos en la lectura con el helado de vainilla de Jordi Guillem, que busca el equilibrio perfecto entre las variedades bourbon y Tahití con la técnica de los ultrasonidos; el Sorbete de Mango Ezpeleta de Fernando Alberdi; Moka con nata recién montada de Fernando Mira; o el Sorbete de Chocolate Negro, Sal y Aceite de Matteo Merella. Suelen ser pocas referencias de la oferta en vitrina, pero dicen mucho del profesional y de su establecimiento.