La hostelería y la restauración miran ya hacia Lyon. En esta localidad francesa ya se ultiman los preparativos para acoger del 23 al 27 de septiembre la próxima edición de Sirha, uno de los principales eventos para el profesional en Europa, sede además del concurso Bocuse d’Or. Se trata, sin duda, de una cita con aires de “edición de recuperación” que servirá para tomar el pulso al sector después de más de año y medio sufriendo los efectos de la pandemia.

Por el momento las perspectivas son más que esperanzadoras, ya que este gran salón de los llamados “métiers de bouche” espera congregar a más de 2.000 expositores y marcas, ocupando más de 100.000 metros cuadrados. Y eso que las fechas no son las habituales.

La directora general de Sirha, Marie-Odile Fondeur, apunta al optimismo también en cuanto a la afluencia de visitantes: “tenemos fuertes señales de profesionales que esperan reunirse en un ambiente cálido para descubrir las últimas innovaciones”. Estas innovaciones apuntan hacia el ahorro, hacia la responsabilidad ecológica, y hacia el creciente interés por las “dark kitchens” y el delivery.

A todo esto cabe sumar la final de varias competiciones de gran calado, especialmente el Bocuse d’Or y la Copa del Mundo de Pastelería. Y es que, pese a las dificultades que la pandemia ha ocasionado para escoger finalistas, ambos concursos prometen grandes dosis de espectacularidad visual y complejidad técnica.

En definitiva, Marie-Odile Fondeur subraya que pese a los cambios derivados de la crisis sanitaria “una feria como Sirha sigue siendo un medio esencial de encuentro. El encuentro es indispensable sobre todo en el universo del foodservice, para poder ver y degustar”.