Recién estrenada como miembro de la Generación Belcolade, su amor por el chocolate ya salió a relucir en su brillante paso por la Escuela de Pastelería de Barcelona, (EPGB).
Cristina Puig responde a ese perfil de vocación sobrevenida después de formarse y trabajar en otro oficio totalmente diferente a la pastelería, en este caso las ciencias medioambientales. Después de algunas experiencias formativas y profesionales en el sector pastelero, se da cuenta de que necesita una base y de que el mejor lugar donde puede adquirirla es en la EPGB. Es ahí donde consolida su aprendizaje y donde despliega por completo su talento.
Hoy ejerce sus habilidades, sobre todo como chocolatera, en Xocopunt, un negocio con tiendas y obrador en Molins de Rei (Barcelona) y Girona.