Daniel Flecha

Hablar de los Flecha es hacerlo de una de las familias panaderas de referencia de nuestro país. Todo arranca en 1957, cuando Antonio y Carmen abren en un pueblo leonés, Santibáñez del Bernesga, la panadería Flecha. Lo hacen apostando por las cocciones con leña y un gran cuidado por los procesos tradicionales. La siguiente generación familiar no solo mantuvo el negocio sino que apostó por crecer y trasladarlo a León. Además, uno de los hijos, Manuel, acabó dando el salto al mundo de la formación, convirtiéndose en una de las piezas claves para el desarrollo y profesionalización del oficio. Hoy, 60 años después, el vínculo de los Flecha con la panadería está garantizado gracias al empuje de Daniel Flecha, tercera generación. Pese a no contar aún con 30 años, este profesional lleva rodeado de oficio toda su vida, algo que le ayuda no solo a nivel técnico sino también a nivel de madurez reflexiva. Como nos reconoce, “en la panadería es fundamental tener esa inquietud de aprender, de crecer profesionalmente. Yo he tenido la suerte de que me gustaba el oficio y al tener tanto conocimiento a mi lado toda la base de aprendizaje fue más fácil”. Un bagaje que le permitió alzarse con la victoria en el Campeonato de España de Panadería de 2019.