Gerard Gil estudió Administración y Dirección de Empresas, aunque desde 2021 está al frente de la panadería familiar, el centenario Forn Gil de Barcelona. Junto con su pareja, la pastelera Esther Real, ha dado un nuevo aire al negocio con una reforma profunda del local madre, en el Clot barcelonés, y una apuesta renovada de la oferta de bollería y pastelería. La clientela se ha adaptado rápidamente a esta nueva etapa, donde todo luce diferente y cada familia de producto cuenta con una zona exclusiva. El establecimiento ya ha ganado dos veces el premio Mejor Coca de San Juan de Catalunya, en 2022 en la categoría tradicional y en 2024 en la de chocolate.