Jesús Fuentes, especialista en masas fermentadas y horneadas en la Escuela Hofmann, es uno de esos ejemplos de cocinero reconvertido en pastelero.
Tras pasar diez años trabajando entre fogones, dejó aflorar su pasión por la pastelería y especialmente por las masas vivas e impredecibles como el hojaldre, el brioche y el croissant. Hoy en día no solo comparte esa experiencia con los alumnos de pastelería de la escuela barcelonesa, sino que se ha convertido en uno de los responsables de esta sensible parte de la oferta de su pastelería.