Giapo, Gianpaolo Grazioli, vuelve a dar una vuelta de tuerca a su producto emblemático, el cucurucho, con dos nuevas propuestas. El cono selfie de té verde y una nueva versión de Chocolate Evolution son dos de las referencias con las que el heladero de origen italiano quiere sorprender de nuevo a los aficionados a las extravagancias de este inclasificable profesional.

El cono té verde selfie se hace eco de la creciente producción del cultivo de esta variedad de té en una de las islas del norte de Nueva Zelanda, Aotearoa, y es una creación que responde a su curiosidad por la diversidad de ingredientes que pueden encontrase en este país. El cucurucho se decora con un marco crujiente, en línea con otros helados con los que también ha hecho un guiño a las nuevas tecnologías.

La idea inicial era realizar un helado de kiwi, un producto autóctono de Nueva Zelanda, sin embargo sorprendentemente no es popular entre la clientela asiática que frecuenta la heladería. Uno de los atractivos de ambos casos, tanto del cucurucho de té verde como el de kiwi que no se ha llegado a comercializar, es llevar al cono el color verde intenso de estos productos.

Por otra parte, en Chocolate Evolution Giapo ha querido trasladar al cono las posibilidades que abre este formato para encontrar 4 texturas. Chocolate Evolution es un helado que lleva cierto tiempo en la vitrina (ver receta en Arte Heladero 174), aunque se trata en esta ocasión de un helado al que ha introducido algunos cambios. Contiene helado de chocolate negro, nibs de cacao caramelizados, y ahora se decora con una plaquita de chocolate sólido en forma de luna y sustituye el mousse de chocolate negro de la versión anterior por chocolate blanco. Es un nuevo ejemplo de que a través de este formato se puede concebir un postre, en el que declinar un producto con tantas variedades como el chocolate.