En las últimas colaboraciones en Arte Heladero, Óscar Palacio, al frente de Helados Artesanos Palacio, ha mostrado el gran potencial del elemento crujiente como hilo conductor para llevar a cabo líneas de helados y sorbetes innovadoras y muy divertidas. Sin complicaciones, solo utilizando una receta base de crujiente (sablé y caramelo en polvo con papel obulato) y saborizándolo, es posible lograr sándwiches y tacos helados para degustar con las manos.
Sándwiches helados
Una tarrina de helado utilizada como molde, un cortapastas redondo y una manga pastelera con boquilla rizada es más que suficiente para realizar esta colección de sándwiches helados que Óscar Palacio y Adrián Valenzuela presentaron en Arte Heladero 211: goloso de chocolate, goloso de pitahaya y maracuyá, y goloso de pistacho y vainilla.
En este caso, el elemento crujiente es una sablé a la que se le da sabor con productos tan diferentes como el cacao, el coco y el jengibre, dando lugar a delicados bocados montados para cogerlos con la mano.
Tacos helados de boniato
En Arte Heladero 206, al dúo Palacio-Valenzuela se unió Arnau Puchol para desarrollar una gama de tacos helados de diferentes variedades de boniato (taco de boniato rojo y sanguina, taco salado de boniato morado y taco vegano de boniato blanco al horno y almendra), que no solo coquetea con el mundo salado, sino que también se hace eco de tendencias en alimentación tan consolidadas como el veganismo.
Si bien las primeras pruebas en busca del soporte idóneo fueron con galleta, después se optó por el caramelo en polvo y el papel de obulato, los cuales aportan una textura muy fina y crujiente que se puede saborizar de muchas maneras. En este caso, con frambuesas, quicos y coco. El resultado en conjunto no puede ser mejor; un formato innovador que se disfruta en dos bocados, a través de diferentes texturas y colores.