Frank Haasnoot ha alcanzado fama internacional, no sólo por sus logros en concursos, sino por sus diseños sorprendentes y únicos que han influenciado a todo el sector y han marcado tendencia.
Ganador del World Chocolate Masters 2011, es copiado en todo el mundo por profesionales que valoran su enfoque artístico, su visión personal, su estilo identificable y sus sorprendentes decoraciones. Y es que, como él mismo explica, “cuando diseño un producto, trato de hacer algo que nadie ha hecho antes, algo que parezca apetitoso y, por supuesto, atractivo a la vista”.
Para entender su estilo, el libro “Prisma” es imprescindible. Con el color como hilo conductor, esta obra alterna creaciones emblemáticas con otras inéditas que comparten estética, intensidad de sabor y ejecuciones perfectas. Repasamos a continuación algunos de sus diseños más originales, incluidos en el libro, que invitan a experimentar y a profundizar en la propia creatividad.
Descubre Prisma de Frank Haasnoot
1. Ginger Noir. Capas y simetría
Haasnoot creó este pastel cuando trabajaba en el Mandarin Oriental de Taipei (Taiwán). Partiendo de la clásica combinación de chocolate y naranja, añadió algo de jengibre para darle un punto picante.
Respecto al diseño, su propósito era mostrar las atractivas capas del pastel. Y en cuanto a la decoración, optó por el chocolate y por una herramienta nada convencional, como él mismo relata. “Normalmente, cuando diseño alguna decoración de chocolate sé cuándo debo utilizar el cuchillo. En este caso, quería crear diferentes formas, así que utilicé palillos de dientes. Lo que me gusta de la decoración es su simetría. Es fácil de hacer, no supone demasiado tiempo y el resultado es único”.
2. Honey. Elegancia y ligereza
Esta particular forma, que tiene como base un aro de PVC cortado en diagonal, la creó cuando se presentó por primera vez al World Chocolate Masters en 2006, donde quedó en cuarta plaza. Y años después la recuperó porque “no es nada sofisticada, pero creo que el diseño es único”, afirma.
Lo fascinante de este pastel es ver cómo a partir de una apariencia sencilla, Haasnoot empieza a crear un discurso lleno de sinergias. Para la parte superior se inspiró en los postres en plato, en los que se utiliza una cuchara para extender una salsa. “Hice lo mismo aquí con una ganache montada y una cuchara caliente para obtener la forma que se observa. Relleno ese hueco con un puré líquido de miel, lo que crea una apariencia limpia y al mismo tiempo refinada”.
3. Tournesol. Sol, pipas, gotas
Amarilla es la luz solar, pero también de las ideas y la espontaneidad. Es el color de la alegría, el desenfado, la naturalidad y también de este bonito individual.
El diseño está inspirado en una trufa llamada Lágrima que realizó hace años. “Sumergía la trufa y luego la colgaba boca abajo para lograr ese efecto. Realicé muchos chocolates moldeados con esta idea. Por ejemplo, cogí globos y los sumergí en chocolate para después dejarlos boca abajo, logrando un elegante goteo. Ese efecto llevó a esta elaboración”.
En cuanto a la decoración, hace un homenaje a la época en la que vivió en España. “Es común ver allí a abuelos comiendo pipas sentados en los bancos. A mí también me encantan las pipas de girasol. Pensé que estaría bien usar algo como eso en mi pastel”.
4. Caen las hojas en Autumn
Si algo caracteriza a Haasnoot es su estilo único e identificable. Un estilo que consigue, en parte, gracias a su particular forma de hacer sus propios moldes.
Entre sus muchos y atractivos diseños de pastelería encontramos sus hojas, sin duda claves en este individual. ¿Pero cuál fue el proceso de creación en este caso? “En el pasado realicé este pastel con una hoja de fresa. Me gustaba el concepto, así que desarrollé varias elaboraciones usando diferentes hojas. En este caso, la hoja parece de otoño, y esa es la razón por la que he creado un pastel en torno a ella. El uso de dos hojas nos da una sensación natural a la elaboración”, asegura.
5. Pasión por las fresas silvestres
Esta es una clásica y deliciosa tarta de fresas salvajes o silvestres con una atractiva textura —la base crujiente se complementa con la cremosidad de la crema pastelera — y un delicioso aroma.
Para este chef, las fresas silvestres son una de sus frutas favoritas y tiene claro que la simplicidad es la clave para sacarles el máximo potencial. Por este motivo, aquí emplea una decoración de chocolate sencilla pero muy efectiva que aprendió en su época en Holanda.
6. Splash Arabica!
Esta espectacular pieza es el resultado de una combinación de distintas cosas “que ya había realizado con anterioridad. Cogí las ideas de diferentes pasteles y las puse todas juntas”, asegura el chef holandés.
La decoración, denominada Chocolate Splash, la desarrolló en su etapa en The Peninsula Hotel de Hong Kong. Reconoce que al principio intentó hacerla a mano, pero se dio cuenta que necesitaba algo externo que girara a gran velocidad. Y a partir de ahí, su creatividad y perspicacia hicieron el resto. “Miré alrededor en la cocina y vi el Robot Coupe. Quité la tapa y anulé el botón de seguridad. La técnica consiste en colocar un disco de cartón sobre las cuchillas (con cinta adhesiva) y encima un papel. Se vierte una gota de chocolate en el centro del papel, se pone en marcha la máquina y ¡voilà!”