La ciudad de Palma de Mallorca cuenta desde hace escasos meses con un nuevo y muy interesante emplazamiento dulce. Nos referimos a la pastelería de Lluís Pérez, en el número 14 de la calle Bonaire, en pleno centro histórico de la capital mallorquina. Se trata de un local fresco y actual, en el que se practica una pastelería evolucionada aunque sencilla y sin artificios, y muy centrada en los productos y sabores locales. En palabras de su autor, “intento transmitir con la mayor claridad posible cada sabor y textura”. En estas páginas, Lluís Pérez, a quien felicitamos desde Dulcypas por su iniciativa y carácter emprendedor, nos cuenta los detalles de su exitoso comienzo, y nos ofrece dos creaciones que ya se han ganado el favor de sus clientes.
¿Por qué decides abrir tu propia pastelería?
Desde que empecé mi formación en el sector mi objetivo final siempre fue tener mi propio negocio donde poder desarrollar mis ideas e inquietudes. Después de trabajar en varios restaurantes con estrella Michelin en Barcelona, Londres y Francia, y aprender de la mano de Oriol Balaguer, todo unido a un momento personal en el que me apetecía mucho volver a mi isla, decidí que era el momento idóneo.
¿Cómo es la nueva pastelería Lluis Pérez?
Es una planta baja en el centro histórico de Palma, una zona muy agradecida. El espacio se divide en tienda, con toda la variedad de productos, y zona de degustación, donde poder disfrutar del producto acompañado de cafés, infusiones, chocolates o refrescos locales. Es muy importante para mí que exista una simbiosis entre local y producto, de manera que se pueda entender correctamente la idea que quiero transmitir, y fue a través del interiorismo que uní ambas cosas. Por ejemplo, con el azul que predomina en el espacio quise homenajear al mar, y a la preciosa costa de la sierra de Tramuntana. Los detalles como las macetas son el toque sutil de tradición, centrifugado por una estética simple, limpia y moderna, para así ofrecer frescura y actualidad.
¿Cuál es tu filosofía de producto? ¿Cuál es el concepto?
Siempre he tenido muy claro que quería contar con productos locales, ya que en la isla disponemos de materias primas excelentes. Intento trabajar directamente con productores de los alrededores, que ofrecen el género estacional en el punto óptimo. Es muy importante para mí intentar ofrecer la mejor calidad, por lo que considero que la base de todo es la materia prima. Continuando con la idea de simplicidad, el producto sigue líneas muy básicas y sencillas, sin artificios. Intento transmitir con la mayor claridad posible cada sabor y textura.
¿Cuál es el perfil de tu cliente? ¿Cuál es la reacción del público ante tus productos?
Palma es una ciudad pequeña, pero en cuanto a población es ecléctica y variada. Por lo tanto, estos primeros meses he recibido todo tipo de visitas; gente del barrio que quiere conocer el nuevo establecimiento, trabajadores que buscan un tentempié, o jóvenes que buscan un sitio en el que estar a gusto. Sí es verdad que he observado un aprecio y una atención que tal vez no esperaba en los pequeños detalles, como por ejemplo la decoración o el packaging. Hoy en día, ya no solo puede hacerse un estudio de mercado hablando directamente con el cliente, si no a través de las redes sociales como Instagram (@lluisperezpastisser) o Facebook, que son las que uso, puedo saber qué llama la atención o gusta al cliente. Así mismo el nivel de conocimiento y atención al producto ha sido más que satisfactorio.
“Continuando con la idea de simplicidad, el producto sigue líneas muy básicas y sencillas, sin artificios. Intento transmitir con la mayor claridad posible cada sabor y textura”
¿Cuál es el balance que haces de estos primeros meses?
Más que positivo, ya que la aceptación por parte de la gente es muy buena, hay clientes que ya son frecuentes, y mucha gente que viene gracias al boca a boca, o recomendada por terceros. La mayor satisfacción viene cuando los clientes simplemente entran a felicitarme por el éxito de mis dulces, o a comentarme lo mucho que gustaron los pasteles que se llevaron el día anterior.
¿Qué planes tienes a medio plazo?
Mis objetivos no están más lejos del día a día... Al querer trabajar con productos de temporada hay que estar constantemente pensando nuevas ideas, soluciones o buscar recursos, lo que hace todavía mas interesante mi trabajo. En general, quiero evolucionar poco a poco, definir mi estilo y el de la marca, interactuar con profesionales locales para sacar el máximo partido a las variedades autóctonas e ir probando con nuevos productos, y ver cómo reacciona la gente, claro.