Unas instalaciones poderosamente equipadas en un paraje idílico a las afueras de Barcelona fueron el escenario que acogió el curso práctico de cuatro días que ha devuelto a Michel Willaume a nuestras tierras.

Troncos, árboles de navidad, mini turrones, vasos y otras muchas presentaciones vistosas fueron el hilo conductor de un curso con varios rasgos a destacar. Por un lado la filosofía práctica del mismo, puesto que todas las elaboraciones estuvieron confeccionadas por la decena de cursillistas asistentes. Por otro lado, Maria Selyanina en sí misma, una figura de la pastelería ampliamente conocida en Rusia y que ha traído a España no sólo su saber hacer y una inversión considerable para abrir esta escuela-taller, sino también a muchos de los profesionales que la siguen desde Rusia y otros lugares del mundo.

El curso de Michel Willaume es el tercer curso monográfico que se imparte en este centro, y en todos ellos el público ruso, por cierto sobre todo femenino, ha protagonizado la asistencia. Son cursos que se alargan una semana y que combinan la formación práctica especializada con otros servicios complementarios que van desde degustaciones, tours gastronómicos, alojamiento en la propia escuela, etc. Una oferta altamente atractiva para este perfil de profesionales emergentes en Rusia y que cuentan además con un poder adquisitivo digno de mención.

Michel Willaume vuelve a nuestras tierras con este curso, pero su intención no es dejarlo aquí, si no aparecer más a menudo y compartir sus amplios conocimientos como chef técnico de Dobla y campeón del mundo de pastelería con el público propiamente nacional. Maria Selyanina también pretende abrir su aula al profesional local y diseñar contenidos y otras modalidades de cursos que puedan resultarles atractivas y cubrir sus necesidades formativas aprovechando también el moderno equipamiento de su Atelier.