Mervier Canal sigue ampliando su línea de pasteles dedicados a personalidades relevantes de la cultura, que inició con el pianista y compositor Albert Guinovart y que recupera la tradición del siglo XIX de tartas como el Massini o la Sara. Postres de factura sencilla, pero que se han convertido en clásicos onmnipresentes.

Su último lanzamiento homenajea a la soprano sueca Iréne Theorin, con motivo del reciente reconocimiento que la Fundación Victoria de los Ángeles le ha hecho durante el festival Life Victoria.

El pastel consta de una base de galleta especiada que transporta a los orígenes de Theorin, crema de vainilla que es una debilidad confesada de la artista y manzanas doradas, un elemento importante en la ópera de Richard Wagner.