Autor: Luis Concepción

Dos años después de que Kajiro Mochikuzi condujera al equipo japonés hasta la victoria en el Campionato Mondiale Pasticceria Juniores de Sigep, este entrenador team manager ha vuelto a conseguirlo con dos nuevos pupilos. Masato Yokouchi y Yuki Matsuda no se dejaron amedrentar por un auténtico ejército de hinchas de la escuadra italiana, que apoyaron a su equipo desde el minuto cero.

De ahí que cuando al principio de la gala el equipo italiano, formado por Mattias Cortnouis y Andrea Marzo, recogió los primeros premios en pruebas como el Mejor Bombón y la Mejor Tarta Moderna de Chocolate (con cobertura Valrhona), la "bancada" de hinchas estallara en euforia. Y cuando parecía que todo estaba del lado de los italianos para alzarse con la victoria general, Japón empezó a darle la vuelta a la situación, arrebatando a Italia uno a uno el resto de los premios menores: Escultura Artística de Chocolate, Azúcar, Postre en vaso, Mejor Bufet y Equipo Más Pulido. La excepción fue el premio al Mejor Postre en Plato, que volvió a ser para Italia.

En la general, tras anunciar el tercer puesto para Francia, Italia descubría que no le quedaba otra que conformarse con la segunda plaza. Ya nada importaba. Cuando Japón se proclamaba campeona fue difícil romper el silencio de un público decepcionado que dominaba en las gradas. La sacudida de la derrota italiana fue diametralmente opuesta a la euforia vivida cinco minutos antes, y lo inundó todo, descafeinando la merecida victoria de Japón.

Porque el equipo nipón realizó la mejor interpretación del tema de la competición, Planet Fantasy, a través de piezas artísticas más evocadoras y un postre en vaso realmente original y diferente. Un postre en vaso que pudimos degustar y valorar como miembros del jurado de la prensa internacional. En él, sorprendieron con diferentes aplicaciones de las gelatinas, un tipo de elaboración de una gran tradición en Japón. En esta creación, una gelatina translucida dejaba ver diferentes componentes suspendidos en medio del vaso, mientras que unos interesantes anillos de gelatina verde rodeaban el interior del vaso. Un postre original que, sin duda, sedujo a la prensa internacional.