El panorama de concursos panaderos se ha enriquecido con el nuevo premio The Baker, que pone en valor el oficio y hace una clara apuesta por el rigor y la unidad. Organizado por la Baking School Barcelona Sabadell del 6 al 8 de noviembre, se posiciona como el dinamizador de una profesión que poco a poco reclama su espacio dentro de los oficios gastronómicos. Y es que por primera vez un campeonato de este tipo tiene lugar en un salón eminentemente culinario. Algo que hay agradecer a la encomiable labor tanto de la escuela como de su director, Yohan Ferrant.
Daniel Ramos, de La Cremita, ha sido el más que merecido ganador del premio con un trabajo muy correcto a nivel de acabados. Impresionó al jurado por su habilidad técnica y enfoque innovador, y fue reconocido con la mención especial al mejor Snack Salado y la mejor Bollería hojaldrada.
Los otros dos finalistas, Diego Marín, propietario de la panadería Pandemonium en Vigo, y Alex Arrieche, de la pastelería Miguez de Santiago de Compostela, consiguieron una mención especial en las categorías de pan nutricional y pan de masa madre respectivamente.
Los tres candidatos, supervisados por un jurado de profesionales del sector (Xavier Barriga, Sylvain Herviaux, Enric Badia y Marta San José bajo la presidencia de Yohan Ferrant y Mari Cruz Barón), demostraron un nivel técnico adecuado lo que se espera para este tipo de campeonatos.