Pierre Marcolini amplía su extensa gama de chocolates dando protagonismo a una de aquellas rara avis más desconocidas por el amplio público: el cacao del sur de la India. Concretamente, se trata de unas plantaciones del sudeste del país, de la región de Tamil Nadu. Es en el propio obrador central del chocolatero de origen belga donde se han recepcionado las habas y se les ha dado el punto de tostado deseado. El resultado es un chocolate que guarda un interesante equilibrio entre su amargor y la delicadeza de su paleta aromática, en la que no faltan matices a cítricos frescos y acidulados, uvas y frutas secos.

Con este chocolate bajo el brazo, Pierre Marcolini, últimamente interesado en el mercado español, ha desarrollado una serie de novedades que toman el protagonismo en la temporada de otoño. El carré “Atrápame” cuenta ahora con una referencia que protagoniza este chocolate con virutas de caramelo. También con un caramelo de mantequilla la familia de los macarons se amplía con sendas propuestas a base de chocolate y chocolate con leche indios. Los románticos corazones de Marcolini reciben en su repertorio una ganache de chocolate de este origen. Lo mismo ocurre con las barras, que además añaden una sutil alianza con vainilla de Madagascar y una fina capa de praliné de avellana y almendra.

Entre los productos horneados de Marcolini, el chocolate de Tamil Nadu también se muestra versátil y bien capacitado para entrar en acción. Por ejemplo con el cake de la maison, que además esta empapado en sirope de cacao y cubierto con un generoso glaseado del mismo chocolate. Más divertido si cabe es el nuevo financier en el que este chocolate está acompañado de almendras de Faro, trocitos de mango y cardamomo.