Quizá esta no sea la selección necesariamente más actual ni la más votada, pero sí que se basa en nuestra experiencia y en cómo hemos visto evolucionar los diseños de monas de chocolate para Pascua a lo largo de los últimos años. Desde el tradicional pastel de mona, que sique teniendo un público incondicional, hasta las figuras más abstractas y conceptuales de Enric Rovira, hay un amplio abanico de opciones que han ido creciendo y diversificándose al mismo ritmo que el profesional se ha despegado de la obligación de ocupar su escaparate con figuras planas con los personajes infantiles de moda. Es entonces cuando han aparecido docenas de ideas en chocolate, la mayoría inspiradas en el clásico formato de huevo de Pascua, que son el fiel reflejo del espíritu inquieto e imaginativo de sus creadores. Estos cinco chefs pasteleros se encuentran entre los más influyentes a la hora de marcar tendencia en esta Pascua chocolatera más libre y personal.
1. El arca de Raúl Bernal
Las colecciones de animales con las que Raúl Bernal nos ha ido deleitando en los últimos años no dejan de sorprendernos. Con un diseño desenfadado e inconfundible, este chef pastelero se ha convertido en un referente indiscutible y muy influyente de lo que se ve en los escaparates de las mejores pastelerías cuando se acerca la Pascua. Su última idea en este sentido es una vuelta de tuerca de sus simpáticos personajes. Se trata de la colección circense “¡Salta Lorenzo!” centrada en un león asustadizo y que además va acompañado de un cómic ilustrado expresamente. Tenéis descripciones técnicas e ilustraciones del cómic en exclusiva en nuestro último número.
2. La versatilidad de Jordi Sempere
Formado al lado de algunos de los mejores chefs chocolateros que ha dado nuestro país, Jordi Sempere siempre es ávido de ofrecer trabajos originales y perfectamente ejecutados. Lo último con lo que nos sorprendió fueron estos personajes “cúbicos” del año pasado. Parece ser que últimamente anda muy atareado preparándose para un concurso muy chocolatero.
3. Las aves de Patrick Roger
Si juntamos chocolate y creatividad en una misma ecuación, sin duda un nombre que aparecerá sí o sí entre los resultados es el de Patrick Roger. Sus increíbles esculturas de chocolate, sus monumentales piezas y, cómo no, sus exquisitos bombones se han convertido en uno de los pilares de la chocolatería francesa contemporánea. Por Pascua le gusta recurrir a figuras como la gallina o el gallo para abordar el manido huevo de Pascua desde otra perspectiva. Aunque el propio huevo también es objeto de reinterpretación como pueden apreciar los lectores de Dulcypas 433.
4. Las “abstrahuevos” de Oriol Balaguer
Es sin duda otro nombre propio del chocolate en nuestro país. Su ingente cantidad de producción de huevos y colecciones de Pascua hace técnicamente imposible resumir en cuatro imágenes esa impresionante trayectoria. Sus trabajos combinan a partes iguales aquellos diseños que mejor conectan con el público infantil, como es el caso de los actuales modelos basados en éxitos de los dibujos animados, con otras obras mucho más abstractas, aunque no por ello menos reconocibles con una u otra idea, casi siempre derivadas del punto de origen: el huevo de Pascua. Para aquellos fans del trabajo de Oriol Balaguer, nada mejor que apuntarse la fecha de lanzamiento de su nuevo libro, Obsession, que incluirá un apartado exclusivo con algunos de sus diseños de Pascua más artísticos y personales.
5. Pienso, luego Rubén Álvarez no me deja indiferente
Lo decíamos al principio, quizá esta selección de chefs que han influido y cambiado la manera de ver la Pascua en pastelería no es necesariamente actual, pero sí que es indiscutible la pertenencia de cada uno de estos chefs. Rubén Álvarez, desde su 33/35 Studio no está actualmente ejerciendo como chocolatero, al menos de forma habitual, pero creemos que sus colecciones de Pascua dejaron huella. Tanto por lo original de sus diseños, como por los conceptos que manejaba, con ediciones limitadas y otros juegos relacionados con el producto huevo, quizá a fecha de hoy nos parecen más obvios pero en su momento sorprendieron a todos.