Los pasados 7 a 9 de Noviembre se celebró en Fira de València una nueva edición de Mediterránea Gastrónoma, que tuvimos el placer de visitar personalmente. La ilusión por el reencuentro se mascaba en el ambiente y, como asegura Manuel Espinar, vicepresidente del Certamen, “esto es un punto de partida para la recuperación, no solo económica sino también emocional”. Ponencias, cocina en directo, catas, el contacto tú a tú con empresas proveedoras, chefs y demás figuras del sector llenaron los pasillos del recinto. La pastelería tuvo su cuota de protagonismo mostrando como es una parte fundamental de la gastronomía, y más viniendo de tierras valencianas. Be Sweet se convirtió nuevamente dentro de la cita en un espacio de talleres y ponencias con la alta pastelería como hilo conductor. Con una zona más diáfana que en pasadas ocasiones, brilló gracias a un cartel de ponentes de primer nivel.
Mucha pastelería en directo
Miquel Guarro y su pastel de haba de chocolate fue uno de los nombres propios de la primera jornada de Be Sweet, que también contó con el gallego Pablo Morales y con Manu Jara procedente de Sevilla. Desde Aspe, Raul Asencio compartió con la audiencia las experiencias de su exitoso panettone. Ya en el segundo día, el disparo de salida lo dio Raúl Bernal con tres espectaculares tartas y, como no podía ser de otra manera, mucho humor a la hora de conducir la demostración. Alexis García y Marlene Hernández trajeron sus tartas gastronómicas de temporada, elaboradas en riguroso directo, y Pachi Larrea compartió la ilusión de un negocio que apenas inicia su andadura en Castelldefels a través de sus pasteles de autor más chocolateros. Cristina Lirola compartió el método creativo y pedagógico del Basque Culinary Centre en el cierre de la segunda jornada. Un poco antes, tuvimos el placer de moderar una interesante charla sobre los retos de la formación en pastelería, acompañados de Ricard Martínez (Espai Sucre), Luis Arrufat (Basque Culinary Center), Alberto Díaz (Iteppa) y Eliseo Valls (Escuela de Pastelería de Valencia).
Talleres a rebosar de gente y muchas caras conocidas demostraron lo necesario de este tipo de iniciativas. Para el tercer y último día todavía quedaba tiempo para disfrutar de la pastelería de dos grandes figuras, Daniel Alvarez desde Elche y Jesús Escalera de Guadalajara (México). Como broche de clausura, una mesa redonda con estos dos profesionales, Rubén Álvarez y los dos artífices de Be Sweet, Pedro García Coy y Carito Lourenço, confirmaron el sabor familiar y no por ello menos profesional que reinó durante todo el evento.
Dignificando la panadería
También el pan goza de un cariño especial dentro de Gastronóma. El Colectivo La Pepa y Jesús Machí del Horno de San Bartolomé al frente, fueron los responsables de una serie de actividades los tres días en el espacio “Pan de Verdad”. Allí no faltaron a la cita para mostrar sus productos y sus principales técnicas, profesionales destacados de este colectivo y otras figuras como Nuño García, a punto de abrir local propio en Madrid, y Mario Roulando.
El momento más emblemático de las actividades panaderas se lo volvió a llevar la entrega de Las Estrellas de la Panadería a los mejores chefs seleccionados en la Ruta del Buen Pan, la iniciativa desarrollada por Panàtics y Pan de Calidad. Un centenar de los mejores negocios panaderos de todo el país se reunieron el lunes a última hora en Gastrónoma para recibir sus distintivos y dar visibilidad al buen hacer del oficio panadero.
Cultura, formación y profesionalización
Y, como decimos, todas estas actividades formaron parte de un despliegue de espacios y talleres con sabor a buena cocina y gran producto durante los tres días. Un elenco de chefs con estrella Michelin procedentes de todo el país e incluso a nivel internacional, alternaron su protagonismo con figuras destacadas de la cocina valenciana. La organización ha valorado el impulso que Gastrónoma permite dar a todos los sectores implicados en términos de formación, profesionalización y cultura gastronómica.
